México.- Contenta, feliz y orgullosa, así define Jenni Rivera su actual estado de ánimo, básicamente por dos razones: su hermano Lupillo está sano y salvo, y en marzo próximo estará su disco y libro autobiográfico homónimos “Mi vida loca”, que lleva una dedicatoria especial a las mujeres mexicanas.

Entrevistada vía telefónica desde Guadalajara, Jalisco, al occidente del país, “La Diva de la Banda” dejó ver que su felicidad obedece a que su hermano, el también cantante regional Lupillo Rivera, se encuentra absolutamente sano y repuesto del susto sufrido.

Dijo que luego del incidente del lunes pasado, cuando un supuesto asalto a mano armada estuvo a punto de consumarse en contra de Lupillo y parte de su equipo de trabajo, “sé que él está bien y por lo mismo yo también; es mi hermano, mi sangre, lo quiero mucho”.

Desde su perspectiva de hermana mayor, el buen estado de salud de Lupillo, quien en nada ha alterado su ritmo de trabajo ni sus actividades personales, es la razón por la que está contenta. “Fue un gran susto, pero pronto se convirtió en una gran felicidad”.

Hilarante, amable y de excelente humor, mencionó que “soy mayor de edad que Lupillo, pero él se ve más grande que yo porque es bien parrandero”. Jenni habló luego de su disco y libro homónimos. Al primero le meterá voz en febrero y el segundo lo terminará en enero.

La entrevistada mencionó que tanto disco como libro serán dedicados a sus hijos, “quienes han sabido manejar la vida loca que yo llevo en esta carrera.

Es un texto sobre mi existencia, de lo que se ha hablado de mí, de mis experiencias personales”. Cada capítulo del libro será un ramillete de experiencias reales, vivencias de Jenni que inician desde que ella nació y terminan hasta la época actual. “Son historias personales que, hoy me doy cuenta, Dios me permitió vivir para ayudar a otras personas”.

Por eso, la dedicatoria especial es para las mujeres, sobre todo mexicanas, que han vivido experiencias como las que ella narra en su libro.

“Mi deseo es ayudar, contribuir a que las mujeres aprendan de mis triunfos y experiencias, sin cometer los errores que yo cometí”.

En otro orden de ideas, Jenni Rivera reconoció que las tres nominaciones que tiene para los premios “Lo Nuestro”, ceremonia de entrega que se llevará a cabo el próximo 22 de febrero, no son obra de la casualidad ni la suerte, sino de la preparación y el trabajo.

“Desde 1993 canto y grabo. Primero como pasatiempo, pero a partir de 1999 me dedico de tiempo completo a esta carrera que tantas satisfacciones me ha dado dentro y fuera del país. Con su propia carrera, Lupillo se dio a conocer de manera masiva primero que yo”.

Ahora, está nominada por Artista Femenina del Año junto con Graciela Beltrán y Alicia Villarreal; por Canción del Año (”De contrabando”) con Mariano Barba y el Conjunto Primavera, y Banda del Año. Confía en ganar, aunque admira a Graciela y es amiga de Alicia.

Para ir a la ceremonia, el próximo 22 de febrero en la American Airlines Arena de Miami, Florida, Jenni no sabe qué vestido se va a poner. “Le voy a decir a mi diseñador en Los Angeles, Gerardo Reyes, que me haga algo bonito, elegante y sencillo a la vez. El sabrá”.

En tanto llega la hora de la entrega de premios “Lo Nuestro”, la cantante de banda no se morderá las uñas (”Mejor busco alguien a quién morder.”), sino que cumplirá tres conciertos pendientes, pasará una semana de vacaciones en Hawaii y descansará el fin de año.

Jenni se presentará esta noche con su espectáculo musical en un amplio escenario de La Barca, Jalisco, y este viernes y sábado concluirá sus presentaciones personales correspondientes a 2006.

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